La inseguridad en Mérida registra un incremento notable, al aparecer por primera vez en el ranking nacional de ciudades más inseguras de México en 2025. La percepción de inseguridad pasó del 22% en 2022 al 41.9% en 2025, colocando a la capital yucateca en el lugar 69 de 91 municipios evaluados. Este cambio sitúa a Mérida dentro del 5% de ciudades más inseguras del país, un hecho significativo para una localidad históricamente reconocida por su seguridad.
Datos clave sobre la inseguridad en Mérida
De acuerdo con el INEGI y la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU), la tasa de homicidios en Mérida es de 1.8 por cada 100 mil habitantes. Además, el 12.6% de los hogares ha reportado extorsiones, mientras que la percepción general de inseguridad alcanza el 41.9%. Este aumento refleja la preocupación creciente de los ciudadanos, aunque los índices siguen siendo inferiores a los de otras ciudades con problemas graves de violencia.
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Comparación con otras ciudades del país
En el contexto nacional, el 63.2% de la población mayor de 18 años considera inseguro vivir en su ciudad. Mérida, con un 41.9%, se encuentra por debajo de las siguientes localidades:
- Villahermosa (95.3%)
- Uruapan (92.5%)
- Culiacán (90.6%)
Sin embargo, el aumento de la percepción de inseguridad requiere atención inmediata de las autoridades para evitar que los índices delictivos y la desconfianza ciudadana sigan creciendo.
Retos y estrategias para mejorar la seguridad
La aparición de Mérida en el ranking nacional implica un desafío para su seguridad pública. Especialistas destacan la necesidad de fortalecer la prevención del delito, incrementar la vigilancia urbana y promover programas de proximidad social que involucren a la comunidad. La percepción de inseguridad, aunque aún menor que en otras ciudades, puede afectar la calidad de vida y la inversión local si no se atiende oportunamente.
La creciente inseguridad en Mérida representa un llamado a la acción tanto para autoridades como para la sociedad civil, con el objetivo de mantener los niveles de seguridad que históricamente han caracterizado a la ciudad y prevenir un aumento de la criminalidad en los próximos años.